Melchor Cano
(1509-1560)

Teólogo y religioso dominico nacido en Tarancón (Cuenca). En 1523 ingresó en la Orden de Predicadores y comenzó sus estudios superiores en la Universidad de Salamanca, donde fue discípulo de Francisco de Vitoria. Posteriormente, y tras haber sido ordenado presbítero en 1531, completó su formación en el vallisoletano colegio de San Gregorio y alcanzó el grado de Magister en Teología por la Universidad de Bolonia en 1542. Un año después consiguió la cátedra de Prima de Teología en la Universidad de Alcalá de Henares, que ocupó hasta 1546, cuando ganó la homónima en la Universidad de Salamanca. En 1551 fue miembro de la legación que el rey Carlos I envió al Concilio de Trento. En 1552 regresa a España, donde será nombrado obispo de Canarias por el Papa Julio III, renunciando entonces a su cátedra salmantina. En 1553 hizo lo propio con su obispado para retirarse al monasterio abulense de Piedrahita, donde concluyó la redacción de la más importante de sus obras ascéticas, De locis theologicis (Salamanca, 1563); en ésta, Cano pretende señalar los loci (lugares o ámbitos) donde pueden encontrarse los argumentos más relevantes para demostrar las verdades reveladas del catolicismo. En 1554 se trasladó a Valladolid tras ser nombrado rector del colegio de San Gregorio. Durante esta última etapa de su vida asesoró en materia religiosa al rey Felipe II y participó en el proceso abierto contra Bartolomé Carranza. Falleció el 30 de septiembre de 1560 en Toledo.