Pedro de La Gasca (1494-1567) Político y eclesiástico español, gobernador del Perú (1546-1550). Nació en Navarregadilla, Ávila, en una familia de hidalgos acomodados próxima al cardenal Cisneros. Hacia 1513, después de la muerte de su padre, se matriculó en la Universidad de Alcalá, donde se graduó de bachiller en derecho. Durante la guerra de las Comunidades colaboró con el bando realista. A partir de 1522 completó su formación universitaria en Salamanca, licenciándose en 1531 en Teología en el Colegio Mayor de San Bartolomé. Fue maestro de artes, juez de estudios y posteriormente rector de dicho colegio. Desempeñó una canongía en la Catedral de Salamanca y fue nombrado juez metropolitano de la Catedral de Toledo. Vicario de Alcalá en 1537, pasó luego al Consejo de la Inquisición y fue también visitador del reino de Valencia. En todas estas actividades demostró siempre gran fidelidad a la Corona, lo que propició que el emperador Carlos V requiriera sus servicios en los dominios americanos. En 1546 marchó a las Indias con el nombramiento de presidente de la Audiencia de Lima y la misión de pacificar Perú. Al fracasar su intento de buscar una solución pacífica al conflicto de los rebeldes pizarristas, organizó un ejército que consiguió en 1548 la victoria en Xaquixahuana, cerca de Cuzco, sobre Gonzalo Pizarro y Francisco de Carvajal, que fueron ejecutados. Después de la batalla, La Gasca puso en práctica una serie de medidas administrativas, económicas y de protección de los indios, con las que pretendía mantener la estabilidad de Perú y favorecer los intereses de la metrópoli. Entre 1548 y 1550 impulsó expediciones de descubrimiento que dieron lugar a la fundación de ciudades como Barco, realizada por Núñez de Prado, o La Paz, por Alonso de Mendoza, en la actual Bolivia. Además, dictó medidas para intensificar la explotación del cerro de Potosí, lo que significó una fuerte afluencia de metales preciosos a las arcas estatales. En 1550 regresó a España y continuó vinculado a los asuntos indianos como asesor del monarca, el cual, en reconocimiento a su eficaz gestión en Ultramar, lo nombró obispo de Palencia en 1553 y de Sigüenza en 1561; en esta última ciudad murió en 1567. |